9 de marzo 2020
Primer día en Making Science – On-boarding
Siempre que se comienza un nuevo trabajo, como todos sabréis, las primeras semanas no son del todo fáciles. Te debes adaptar al equipo, conocer sus gustos, entender los ritmos que llevan en la oficina y sobre todo qué metodología de trabajo es la que desempeñan. Pues bien, ese primer día todo era normal. Me recibieron como a toda persona le gustaría que le recibiesen en un trabajo nuevo, me hice una idea de cómo iban a ser mis próximos meses, dónde iba a ir a comprar comida si algún día se me olvidaba o hasta donde me tomaría unas cervezas a la salida del curro con mis nuevos compis. Pero la situación con la Covid-19 no era la ideal. Cada día que pasaba en España había más y más casos, y con mi segundo día llego “LA NOTICIA”. Nos confinarían hasta nuevo aviso. Tocaba teletrabajar, y con ello, todos los planes que me había hecho de repente se disiparon. Tocó conocer a la gente a través de las famosas videollamadas, aprender cómo funcionaba el departamento a través de los chats del Hangout y de la cámara. Está claro que, siendo difícil en una situación normal, esto no lo mejoraba…
Los mejores retos son los que no te esperas, los que en una situación tan rara como la que nos estaba tocando vivir te obligan a enfrentarlos ante todo y sacan lo mejor de ti.
De esta situación saqué unos puntos clave que a mi me han servido mucho a lo largo de estos meses:
- Crear un vínculo de confianza con mi equipo: fue uno de mis objetivos desde el inicio. Mostrar que, pese a todo, puedes y debes estar al 100% y que vean que pueden confiar en ti.
- Responsabilidad y proactividad: tener claro que lo que te piden no es suficiente. Es algo que me repetía y me repito cada día. No es negativo, es una manera que existe para que cada día te superes.
- Es muy importante tener una rutina en tu día a día: no por trabajar desde casa debes hacerlo en pijama y desde el sofá. Yo aposté por hacer lo que hacía antes: me despertaba, me duchaba, desayunaba y empezaba la jornada. Mantener esta rutina hace que los días no pesen demasiado.
- Positive Mind: Mantener una mente positiva siempre ha servido, pero ahora es vital. Salimos de esta situación de una manera mucho más madura, valorando todo mucho más. Como siempre digo, lo positivo atrae lo positivo.
Nunca sabes el giro que puede dar la vida. De repente todo cambia, y ante eso, solo puedes mirar hacia adelante e ir superando los retos que te van poniendo. Suena a tópico, pero luchar por lo que quieres es algo que debería de repetirnos “Alexa” cada día. Afrontar de la manera más positiva la situación solo te va a traer cosas buenas y de nada vale ver todo negro, a pesar de que la situación no sea la más bonita. Y todo esto es lo que hago desde que entré en esta casa y caminé ese pasillo con techos fucsias. Marta