- Primer Renderizado de Contenido o FCP. El tiempo que tarda la página en cargar la primera imagen o fragmento de texto, por ejemplo el logo o el menú de navegación.
- Primer Renderizado Significativo. El tiempo que tarda la página en cargar el contenido principal de la página con sus imágenes y textos correspondientes.
- Índice de Velocidad. La rapidez con la que se rellenan los blancos de los contenidos que se van pintando en la página. Cuanto más bajo sea el número, más rápido se carga el site.
- Primer Tiempo Inactivo de la CPU. Es el tiempo que transcurre hasta que los principales elementos de una página son mínimamente interactivos.
- Tiempo hasta que está interactiva. El tiempo que ha de transcurrir para que la página sea completamente interactiva.
- Latencia de Entrada Estimada o FID. El tiempo que tardan los elementos en responder a la interacción del usuario durante los 5 segundos de carga. Si la latencia es mayor a 50ms el usuario percibirá que la página tarda en cargarse.
Oportunidades: Recomendaciones que ofrece Google PageSpeed en base al análisis de Lighthouse sobre cómo optimizar las métricas de rendimiento de la página. Al lado de cada recomendación aparece una estimación de cuánto de rápido se cargaría la página si la mejora se implementara. Diagnóstico: Recomendaciones más técnicas pensadas en los desarrolladores principalmente que mejoran el renderizado de la página, entre ellas reducir el número de nodos de los que se compone la página o el tiempo de ejecución de JS. ¿Cómo mejorar la puntuación? A continuación, mencionamos algunas recomendaciones generales que mejoran el performance y aumentan la puntuación de PageSpeed de Google.
- Aplaza la carga de las imágenes o vídeos que no son visibles de entrada. Tecnologías como Lazy Load permiten la carga progresiva de los recursos a medida que los necesita el usuario al interactuar con ellos o hacer scroll. Su implementación reduce el tiempo de carga inicial ya que se carga solo lo que hay en zona visible de la pantalla a ojos del usuario.
- Elimina o aplaza los recursos que bloquean la carga de la página. El bloque se produce cuando el navegador se encuentra un script o un CSS al procesar el HTML. Para continuar con la carga de la página, el navegador tiene que detenerse y pedir el archivo al servidor, esperar a que se descargue y procesarlo. Hasta que no lo ejecuta no puede terminar de procesar el resto del HTML
- Evita los redireccionamientos innecesarios. Resuelve los bucles de redirecciones, ya que se pierde tiempo de carga en ir de una página a otra.
- Elimina las reglas de CSS que no se utilizan. Suprimir las líneas que no se usan mejorarán el rendimiento de tu web, ya que estarás reduciendo el tamaño de tus hojas de estilo. Puedes ver el CSS que no se está usando en la consola de Chrome, en el apartado Coverage.
- Actualiza tus imágenes a los formatos de próxima generación: JPEG 2000, JPEG XR o WebP. Se trata de formatos de imagen que se descargan de forma más rápida y consumen menos datos, además de tener características de compresión y calidad mucho mayores a los clásicos formatos PNG o JPEG. El principal problema es que estos formatos no son compatibles aún en todos los navegadores, por lo que habrá que seguir de cerca su evolución durante el 2019 para ver si finalmente podemos implementarlos en las webs.
Fuentes: Google y LightHouse